Dehesa de Conejeros

Frente a la urbanización de La Sierrilla y a tan solo 500 metros del barrio de Macondo, se encuentran las ruinas de la Dehesa o Paraje de los Conejeros. Sabemos que este lugar también se llamó Arenal de Francisco Ávila, y se conoce de sus existencia desde el siglo XVII.



Junto a las vías del ferrocarril se divisa un conjunto de viejas edificaciones de lo que fue en su día esta finca. 

En 1909 conocemos que el lugar tiene casa de dos pisos con 15 habitaciones, un cobertizo con cabida para 20 reses y dos cuadras. Se indica la existencia otra casa de 4 habitaciones para los pastores, una pocilga para 50 cerdos, una huerta, dos cercas y una charca.


Alfredo Villegas, en el Libro de Yerbas de 1909, describe así la dehesa:
"Es de pasto y labor: hace 500 fanegas del país y está situado á 4 kilómetros de Cáceres por la carretera de Salamanca. Linda N., Arenal de Loaisa ó Nabucos; Saliente, cañada de Conejeros; M., Arenal de García Golfín, y P., Arenal de Porcallo y tierras del heredamiento del Cintado. Tiene casa de dos pisos, con 15 habitaciones, un tinado para 20 reses y dos cuadras; otra casa de 4 habitaciones de pastores, una zahurda para 50 lechones, una huerta de media fanega, dos cercas de 6 y 12 fanegas y una charca abrevadero de ganados. El camino viejo de Cáceres al Arroyo es servidumbre de paso de esta finca y linda además con el cordel de merinas y la Carretera de Castilla."
Vemos cómo la descripción determina además las fincas que limitan con la Dehesa de Conejeros, entre las que se encuentran la del Arenal de García Golfín, donde se encuentra en la actualidad el Hotel Palacio de Arenales.


En 1961 se realizaron reformas para ampliar una de las estancias, crear un oratorio o capilla, e incrementar la altura de la torre, que quedó sin finalizar tal y como se ve en las imágenes, sirviendo como lugar de anidamiento de cigüeñas y objetivo fácil de pintadas.





Entrada al oratorio o capilla, con un escudo y esgrafiado de conejos.