BANDO
Don Germán Rubio Andrada, alcalde-presidente del excelentísimo Ayuntamiento de esta ciudad.
Hago saber: Que estando prevenido en las Ordenanzas Municipales que los perros que vaguen en la vía pública han de llevar bozal, cuyo precepto está, desgraciadamente, hoy olvidado por el vecindario, y con el fin de evitar las graves consecuencias de la hidrofobia.
He dispuesto: Que en el término de veinticuatro horas, a partir de la fecha del presente Bando, todos los perros que vaguen por las calles, estén provistos del correspondiente bozal por sus respectivos dueños; transcurrido el plazo antes indicado sin efectuarlo, se procederá al recogido y sacrificio de dichos animales, en las forma que determina el artículo 246 de las Ordenanzas Municipales.
Cáceres, 29 de Enero de 1918.
Germán Rubio